Elecciones y obras

Curiosamente estas dos palabras suelen ir de la mano en la mayoría de los casos. Cuanto más cerca las elecciones, más obras empezadas.

He escuchado en las noticias que el domingo pasado que se han registrado caravanas de hasta 30 kilómetros en la autovía Sevilla Huelva. La culpa es, lógicamente, la acumulación de vehículos que volvían de pasar la semana santa en la playa y, no tan lógicamente, las obras que se están haciendo a la altura de la población de Bormujos para dotar a la autovía de un tercer carril de entrada y salida.

¿He dicho obras?

En realidad no hay ninguna obra. Hace cosa de dos meses se anunció a bombo y platillo que se iba a construir el tercer carril en la autovía para favorecer la entrada y salida a la ciudad y reducir las colas que se forman (sinceramente dudo de la eficacia de este método porque el embudo está en los puentes que cruzan el Guadalquivir y no en la autovía). Dicho y hecho, las obras empezaron: tala de las adelfas que pueblan la mediana, pintado de amarillo de las líneas de la carretera para dejar espacio a las máquinas, sembrado de conos perfilando el nuevo, y estrecho, itinerario, maquina y obrero arriba y abajo... la cosa marchaba. Y lo digo en pasado porque desde hace cosa de un mes allí no hay ni un alma (y paso por allí dos veces al día como mínimo). Ni obreros ni máquinas, solo quedan los sempiternos conos y las lineas amarillas de la calzada estrechando los carriles y creando un obstáculo más a la ya espesa circulación de vehículos.

Ya no hay ninguna obra sino sólo los restos de la estupidez de los políticos que pretenden comprar nuestros votos con obras empezadas y que no seguirán hasta después de las elecciones, eso con suerte, sólo para poder echarse una foto junto a ellas y poder decir "esto es lo que estamos haciendo por la ciudad"... como si no hubieran tenido tiempo en 8 años que llevan ya gobernando la ciudad. ¿Se creen que somos tontos o que?

PD: La foto no es de la A-49, es que me pareció representativa para la entrada.