01 abril 2007

Cambio Radical

Llevo desde el otro día que vi un trozo del programa Cambio Radical esperando a "enfriarme" para escribir esta entrada y esta misma mañana he leído un post de Andrés que ha vuelto a encender la mecha.

A la pregunta ¿qué vende el programa? la respuesta más obvia es un cambio de aspecto a través de la cirugía estética. Pero en realidad si prestamos atención a las palabras de la presentadora y al mismo estilo del programa vemos que en realidad venden un cambio de vida, o sea, a través de la cirugía estética conseguirás una vida de éxitos.

Desde mi punto de vista hay un problema en este enfoque y es que venden algo que debería conseguirse con tiempo y esfuerzo como algo fácil de alcanzar. Partiendo desde lo puramente físico o estético, cualquiera de nosotros que no esté contento con su aspecto puede cambiarlo (perder peso, ganar forma física, tonificar el cuerpo, cuidarse la piel y el pelo, etc) pero eso lleva una cantidad considerable de tiempo y sobre todo de esfuerzo. No me cabe ninguna duda que ese cambio de aspecto mejorará la autoestima de la persona que lo lleve a cabo y probablemente le lleve a obtener cierto grado de éxito, o de satisfacción, en su vida personal. Pero la clave está en que el cambio lo ha conseguido uno mismo con esfuerzo y tesón, te demuestras a ti mismo de lo que eres capaz y a la vez que se va produciendo el cambio cambio físico se produce uno mental, ganas autocontrol, autoconfianza, capacidad de superación, voluntad... y es esto lo que a posteriori te llevará al éxito personal. Lo importante es el camino, el proceso de transformación de uno mismo (como en la antigua Alquimia) y no tanto el resultado final.

Estas pobres chicas que se han sometido a duras sesiones de cirugía estética, recordemos que una de ellas ha pasado unos cuantos días en la UCI, han conseguido sin esfuerzo lo que querían y ahora estarán pletóricas... cuando lleven un año con su nuevo aspecto me gustaría que se les hciera una entrevista a ver que tal.

1 comentario:

Antonio España dijo...

Anoche estaba puesto el tal programa en la televisión y tuve ocasión de ver un trozo. Pero lo que más me llamó la atención fue hace unas semanas cuando lo estaban promocionando antes del estreno y el anuncio, adivina justo después de cuál lo pusieron: ¡de otro anunciando una campaña en prevención de la anorexia! Como tú dices, menos mal que no tenía el ordenador a mano...

Lamentablemente, me temo que la responsabilidad individual no es un valor que preconce la corrección política. Parece que nos da miedo asumir que somos nosotros los dueños de nuestro destino y de las consecuencias de nuestras acciones y omisiones.

Es verdad que puede resultar abrumadora esa responsabilidad, pero lo malo es que negarla supone delegar en otros la tarea de labrarnos nuestro futuro y aceptar que nos marquen desde fuera lo que más nos conviene. Se inicia así un camino todavía más abrumador si cabe.

Pero yo soy optimista y creo que poco a poco la libertad vuelve a abrirse camino.